Las salitreras y los puertos constituyeron el enclave de las nuevas organizaciones populares. Allí fueron tomando conciencia de su importancia e hicieron de las huelgas su arma de presión más efectiva. La primera huelga tuvo logar en 1890, protagonizadas por los obreros salitreros de Tarapacá. Posteriormente, entre 1901 y 1908 se registraron en chile más de 200 huelgas que, por lo general, no fueron bien acogidas por autoridades y empresarios, lo cual no hizo más que aumentarlas.  Así, la primera década dl siglo veinte estuvo plagado de manifestaciones que convocaron a miles de trabajadores. La movilización popular era vista como una amenaza al orden publica y a la propiedad privada, por lo que la respuesta más utilizada fue la represión y la violencia implementada por las autoridades policiales, o en casos más graves, por la Marina o el Ejército.

Huelgas:

1-     1.- Huelga de la mancomunal de Iquique (1901)

2-      2.-Huelga de sociedad de resistencia de los tranviarios de Santiago (1902)

3-      3.-(1903.) Huelga portuaria llevada a cabo en Valparaíso. Se produjo en rechazo a la petición de aumento salarial de los obreros de la compañía inglesa y sudamericana d Valparaíso. El caso termino con una revolución popular, incendios, saqueos, un asalto al Mercurio de Valparaíso y alrededor de medio centenar de muertos.

4-      4.-Huelga de la carne en Santiago. Sube el costo de la vida debido al laza de la carne argentina. Hubo alrededor de 70 muertos y 300 heridos.

5-      5.-(1906). Huelga de Antofagasta organizada por distintos gremios, que pedían una extensión de media hora para almorzar. La negativa del ferrocarril ingles provoco serios disturbios, incendios y saqueos que le costaron la vida a alrededor de 150 personas.

6-      6.-Huelga protagonizada por lo salitreros de Iquique, exigiendo mejores salarios, la adaptación de medidas de seguridad industrial y el fin del monopolio de las pulperías. Una vez reunidos los obreros y sus familias en la Escuela Santa María de Iquique, el general Roberto Silva Renard, jefe de las fuerzas militares, ordenó insospechadamente abrir fuego contra las masas. El trágico saldo oscila entre los 500 y 2 mil millones de muertos.